Existen muchas clases de jamón en el mercado y para la persona menos experimentada a veces puede resultar abrumadora la gran variedad de jamones que existen. ¿Cuál es el mejor jamón ibérico calidad precio si quiero disfrutar de un sabor inigualable a un precio asequible? ¿Son todos los jamones ibéricos iguales?
Muchas veces, al querer encontrar el producto más barato, puede que no te des cuenta de que el producto que estás comprando posee una menor calidad, menos jugoso y con demasiada grasa, lo que podría decepcionarte si tenías unas altas expectativas, especialmente si hablamos de ocasiones especiales, con invitados, y por supuesto cuando se trata de restaurantes o empresas del sector de catering.
Entender sobre la calidad del jamón es importante, ya que así nunca comprarás un producto pensando que es de una alta calidad, cuando en realidad no era tan bueno, ya que muchas veces la información comercial puede confundir.
En este post vamos a mostrarte lo que es para nosotros es el mejor jamón ibérico calidad precio. Muchas veces, si el precio es un problema, es mejor optar por un loncheado de jamón antes que por un jamón de baja calidad, ya que cuando se trata de jamón, al igual que con el vino o el queso, no es comer más cantidad lo que le da más valor al producto, sino el hecho de que puedas disfrutar de un producto exquisito y un sabor único.
¿Qué jamón ibérico es mejor según su relación calidad precio?
A la hora de elegir un jamón que tenga la mejor relación calidad precio, te recomendamos fijarte en los siguientes aspectos.
1. Jamón de bellota
Un aspecto que vas a notar mucho en el sabor y la calidad del jamón que compres es la alimentación que ha recibido el cerdo. Los jamones de bellota como Jamones Tartessos proceden de cerdos que se han alimentado principalmente de bellotas y hierbas naturales y se han criado en libertad.
Esto es muy importante, porque el cerdo tiene que desplazarse para encontrar las bellotas, lo que hace que sus patas y pezuñas sean más largas y estén más desarrolladas que cuando es un cerdo que se ha alimentado a base de piensos y no se ha criado en libertad. Por así decirlo, los cerdos que hacen ejercicio favorecen que la grasa se infiltre en la carne, un aspecto que es determinante para darle el sabor especial que lo diferencia de otros tipos de jamones.
Ten en cuenta también que si buscas calidad en un jamón, la calidad de la carne y de las grasas es esencial para que su sabor sea delicioso al paladar.
2. Jamón 100% ibérico
Aunque existen jamones de 50 o 75% ibérico de bellota, con un sabor delicioso y una gran consistencia, nosotros te recomendamos que si buscas la máxima pureza en el producto te fijes en que la pata de jamón que compres sea 100% ibérico.
Esto lo vas a saber enseguida por la etiqueta color negro, donde se especifica que cumple con la norma de calidad del ibérico. Esto quiere decir que ese jamón procede de un cerdo cuya madre y cuyo padre son 100% ibéricos, y no cerdos de cebo. Este aspecto influye mucho en la calidad, la intensidad y la consistencia del producto.
Los jamones 100% ibéricos son estrechos y alargados, tienen una grasa más fluida. En cambio, un jamón que sea 50% ibérico es más ancho, pero más corto, y su grasa es más dura, lo que al final vas a notar a la hora de aprovechar bien el jamón. Al final siempre va a ser mejor disfrutar de un producto con mayor pureza y donde la grasa se haya filtrado bien.
Ahora bien, que un cerdo sea del 50 o el 75% no significa en absoluto que sea de mala calidad, pero sí de una calidad inferior al 100% ibérico. Si consumes un jamón ibérico del 50 o el 75%, asegúrate de que sea jamón de bellota.
3. Cantidad y calidad de la grasa
¿Todos los jamones que podemos encontrar en el supermercado son deliciosos? Aunque nos encanta el jamón, tenemos muy claro que la realidad no es así. La procedencia del cerdo, el tipo de alimentación, los procesos de elaboración y la calidad de la marca influyen de manera notable en el resultado final.
Además del etiquetado, si buscas el mejor jamón calidad precio hay varios aspectos que debes tener en cuenta. Por ejemplo, que el etiquetado incluya información completa y que la cantidad y calidad de la grasa sean las adecuadas. Fíjate en detalles como el peso, lo que también influirá en el precio final. En muchos establecimientos también vas a tener la posibilidad de degustar una muestra del jamón, lo que también te ayudará a tomar tu decisión.
En Jamones Tartessos llevamos desde el año 1890 trabajando para maximizar la calidad de nuestros jamones, lo que nos ha permitido conseguir un producto único y exquisito, con un sabor singular y una perfecta filtración de la grasa. Nuestros jamones proceden de nuestros cerdos ibéricos, criados en libertad en nuestras dehesas en la sierra onubense.